Todas las personas necesitan ser reconocidas por el trabajo realizado, especialmente si requirió de un esfuerzo extra. No hay nada peor que sentirse ignorado, no visto o escuchado en el centro de trabajo. El sentir que las contribuciones realizadas no son importantes o siquiera tomadas en cuenta, puede llevar a sentimientos de no pertenencia o duda del valor personal. Existen múltiples maneras de hacerse notar y lograr el reconocimiento al esfuerzo realizado.

Antes que nada, es necesario considerar las expectativas realistas planteadas acerca del reconocimiento esperado. Cierto es que se espera ser considerado, pero pocas veces se toma el tiempo de realmente identificar y tener claro lo esperado para poderse sentir tranquilo en cuanto al reconocimiento, ya que es algo que depende de otras personas. Lo que depende de uno mismo, es el auto concepto y el valor que uno se otorga, hacer que éstos dependan de las acciones de otras personas, solo lastimará la autoestima.

Cada jefe y cada empresa son especiales y diferentes, cierto, pero la mejor manera de hacer notar a los superiores el trabajo realizado, es logrando un desempeño excelente y resultados notables, aún así, en algunos casos, esto no es suficiente para destacar dentro del entorno laboral y lograr el ansiado reconocimiento al esfuerzo dedicado y las consiguientes oportunidades de desarrollo.

Si realmente se tiene la intención de impresionar a los superiores, habría que preguntarse más bien: ¿cómo puedo inspirarlos para que me necesiten? Muchas veces hacer un trabajo impecable no es suficiente, si lo que se desea es ser considerado como alguien importante para la organización, lo ideal es demostrar efectivamente cómo los resultados que presenta son críticos para el éxito de su jefe y de la empresa.

También es importante, antes de lograr el reconocimiento, considerar aceptarlo y recibirlo.

Esto es, cuando los elogios llegan, en ocasiones no se sabe cómo recibirlos y se puede caer en falsa humildad, ocasionando que la visibilidad anhelada y el reconocimiento se diluyan en la atención a otras personas. Un ejemplo de esto ocurre cuando el reconocimiento llega, aunque sea a través de algún comentario de un superior o compañero y se desvía la atención hacia la contribución de otras personas o se minimiza el esfuerzo realizado diciendo que no fue nada importante lo logrado.

Es más apropiado recibir con humildad y agradecimiento el halago a la labor realizada con un gracias sincero o un “aprecio el reconocimiento”, que una respuesta desviando la atención a otras personas.

Para conseguir la atención al trabajo realizado es ideal considerar los siguientes puntos:

1.-Pedir consejo

Muchas personas piensan que, al hacerlo, parecerán menos capaces de lo que son o que se les puede juzgar como ineficientes, sin embargo, esto no es necesariamente así. En un experimento, 170 estudiantes universitarios trabajaron en una serie de tareas en la computadora, a todos ellos se les dijo que serían asignados a un compañero virtual que completaría el mismo trabajo, (el compañero era realmente una simulación computarizada). Al terminar, “el compañero” decía:

– “Espero que todo haya estado bien” o “espero que todo haya estado bien, ¿tienes algún consejo?

Como resultado, aquellos alumnos a quienes se les pidió consejo calificaron a su compañero como más competente que aquellos que no habían solicitado ayuda.

Es importante recordar que es mejor pedir consejo que opinión. Ya que el solicitar un consejo, se crea un compañerismo y empatía entre el jefe y quien solicita la ayuda, lo que puede animarlo a considerar o apoyar más las ideas presentadas. Por otro lado, cuando se pide un consejo, el jefe, es más propenso a ser un evaluador más objetivo.