Cómo ser mas productivo cuando los problemas en la familia me impiden concentrarme
Tiempo y energía son recursos fijos, aquellos individuos que participan en múltiples roles simultáneamente, experimentan un agotamiento o falta de recursos, que impiden ser efectivos en otros roles. Se considera que es un conflicto cuando hay insatisfacción, cansancio emocional, apatía y bajo rendimiento tanto en las actividades familiares, en el trabajo o en ambas.
El equilibrio entre la vida personal y el trabajo siempre es complicado, se habla mucho de cómo el trabajo puede interferir en la vida personal, sin embargo no se considera tan vital el que esto ocurra de manera inversa, sin embargo, sí ocurre y puede conducir a un círculo vicioso, ya que al tener situaciones que resolver de la familia en horas de trabajo, no se cumple a cabalidad con éste, creándose mas problemas que terminan llevándose a casa y así…Este conflicto ha contrapunteado ambos roles, hasta casi considerarlos “enemigos” entre sí.
Cuando esto ocurre, generalmente por la frecuente interferencia de situaciones familiares, llamadas o mensajes, puede conducir hasta a límites como el llamado micromanagement en el que las autoridades no solo traten de evitar la interacción con la familia en horas de trabajo, no faciliten y hasta pueden llegar a impedir la participación en determinados eventos familiares en horas límites o cercanas a la terminación del horario laboral, lo cual puede llevar a ansiedad y estrés.
Estas emociones causadas por la limitación a la atención de los eventos o situaciones familiares, así como la preocupación que se genera al no estar presente para resolver un problema, recoger a un hijo en alguna actividad, atender a un familiar enfermo o vivir un duelo personal, son llamadas distracciones.
Es importante tener en cuenta que todas las emociones son imanes de atención, n especial, las emociones negativas, pues son consideradas “amenazas” por el cerebro, el cual enfoca toda la atención en sobrellevarlas, inhibiendo la función cognitiva e impidiendo lograr la concentración en otra cosa diferente a sobrevivir.
Las emociones negativas, actúan como la marea, pueden producir momentos de distracción como olas que tienen un punto mas álgido y posteriormente, la ola baja a un punto más leve, permitiendo que pase la señal de alarma cerebral. Esto no se refiere a ignorar o no sentir las emociones, mas bien, es una técnica que puede funcionar para ayudar a concentrarse cuando las emociones o preocupaciones interfieren en lograr el enfoque en las tareas cotidianas.
Un estudio realizado sobre este tema, reveló que lo idóneos es lograr un equilibrio 3:1 en cuanto a emociones positivas y negativas, considerando que las negativas disminuyen la habilidad de concentración. Sin embargo, una persona viviendo un duelo, puede encontrar difícil equilibrar esto, pues es dominado por el dolor que vive. Sin embargo, aunque esto es difícil de lograr de manera natural, se puede lograr a base de práctica, si se comienza por hacer una lista de motivadores o aceleradores de emociones positivas,
En el momento que la emoción negativa invada el ánimo, antes de llegar a un punto de angustia o depresión, lo ideal es tratar de distraerse y cambiar esa emoción negativa por una positiva o si no es posible, alguna más neutra. Se puede empezar por ir a buscar a un compañero de trabajo, saludarlo y platicar algo trivial, dar una vuelta al baño o tomar un poco de agua mientras se trata de convivir o compartir algún comentario con quien se encuentre cerca. Estas estrategias que parecen apoyar la distracción, ayudan a relajarse un poco y lograr enfocarse en las actividades programadas después. Es equivalente a darse pequeños recesos de tiempo para distraerse o procrastinar, permitir a la mente regresar a la emoción dominante, con el compromiso de volver a lo que demanda la mayor atención.
¿Cómo evitar distracciones en el área laboral cuando se vive un duelo o no hay apoyo para resolver situaciones de logística familiar?
- Lo primero, es tratar de dejar en casa todo el drama y los síntomas de ansiedad, con la firme intención de atender en el trabajo lo que haya que resolver y considerándolo una distracción o liberación mental de las situaciones familiares.
- Comprometerse a dejar en un cajón el teléfono celular durante el curso de la jornada de trabajo. En caso de ser esto imposible, se puede comprometer a revisarlo por intervalos de una hora, con el fin de que durante ese tiempo, no se utilice en absoluto.
- Los equipos de telefonía inteligente son las principales fuentes de distracción, aún cuando solo se toma por momentos para resolver pequeños asuntos domésticos, aparecen conversaciones que demandan atención, y que no ameritan trato de emergencia, además de que generan una adicción y trastorno de ansiedad generalizada por estar revisando constantemente los mensajes recibidos y las redes sociales, las cuales, son una de las mayores distracciones en el trabajo, que aunque en teoría el horario laboral no las permite, son con frecuencia utilizadas como recreación en los espacios de tiempo ocupados para despejar la mente y en otros que más bien generan desvío de atención.
- Las pausas activas que se llevan a cabo diariamente en las empresas, favorecen minutos de distracción y camaradería que son factor clave para volver a concentrarse de manera mas fácil.
- En muchas ocasiones ver a los compañeros mas exitosos puede ser desmoralizante cuando se está viviendo un estado emocional complicado, sin embargo, el hecho de compartir las metas o ideas de quienes están tratando de cumplir un objetivo en conjunto, puede ser inspirador. Una buena idea sería acercarse a comentar sobre las expectativas en común.
- En otras ocasiones, aconsejar a otros sobre cómo resolver ciertos problemas, puede ser de gran utilidad, ya que escucharse uno mismo dando ideas, instrucciones y detalles, puede ser muy útil para aclarar la mente, y en algunos casos, aplicar las sugerencias o consejos en la situación personal.
- Cuando se presentan situaciones o problemas que ocupan la mente mas que el trabajo pendiente por realizar, lo mas adecuado será compartir la información de lo que ocurre con el jefe directo y algunos compañeros que pueden apoyar o que por la situación pudieran verse involucrados o afectados por lo que ocurre, sin embargo, el trabajo no es el mejor lugar para compartir lo que consume la mente y la concentración a pesar de que siempre hay alguien dispuesto a escuchar. Es importante ser selectivo con quien se comentan los problemas familiares. Cierto es que algunos compañeros pueden ser buenos amigos, sin embargo, no es adecuado ir ventilando los asuntos personales a riesgo de cometer indiscreciones que posteriormente puedan propiciar problemas con el equipo de trabajo.
Comprometerse a ciertas rutinas como dormir el tiempo suficiente y lograr un descanso reparador, ayudan mucho a evitar distraerse y a lidiar con emociones negativas. En caso de no conciliar el sueño, se recomienda comprometerse a estar en cama descansando sin aparatos de tecnología a la misma hora diariamente, lo que creará una rutina que favorecerá un mejor descanso. Está demostrado que las personas que no duermen bien, son mucho más propensas a las emociones negativas, a estar irritables, procrastinar y tener mayores problemas de concentración.
Hacer un diario de gratitud y emociones es una idea que ayuda a descargar la mente de pensamientos estresantes. Cuando en el trabajo se sienta el exceso de pesar o ansiedad por revivir un duelo, o por agobio de compromisos familiares, puede ayudar a ser más efectivo en lo que se esté realizando, el tomarse un tiempo con cronómetro para escribir los sentimientos, realizar unas respiraciones profundas y al terminar el tiempo programado para eso, volver a enfocarse en el trabajo.
Hacer ejercicio con frecuencia, tomarse un tiempo de descanso libre de tecnología y si es posible en la naturaleza, pueden ser hábitos sencillos de cumplir diariamente, que a la larga generan bienestar y apoyan a la concentración en momentos necesarios como el trabajo o la misma resolución de los problemas personales pues fomentan el descanso mental y a la postre ayudan a pensar con mayor claridad.
Múltiples estudios han demostrado que meditar aunque sea 5 minutos al día o practicar yoga, favorecen un estado de bienestar general que puede ayudar a superar problemas. El truco es comprometerse con uno mismo a priorizar el bienestar personal y en consecuencia, tomarse el tiempo para generar nuevas rutinas y hábitos.
Realizar todos estos compromisos con uno mismo, no resuelven los problemas familiares o personales, sin embargo favorecen un estado de mayor calma y ecuanimidad que pueden ser de beneficio para resolver los problemas.
Es por lo anterior que la consciencia y la regulación de emociones son estrategias muy utilizadas para lograr enfoque y resultados en todas las tareas a emprender.
La mayoría de las personas no encuentra ese tiempo para sí mismo nunca, pues se considera “egoísta” no atender a todos los demás alrededor después de cumplir con horas de trabajo. Sin embargo, tomando en cuenta que una persona bien descansada, satisfecha en su trabajo y que logra equilibrar sus emociones con el fin de concentrarse cuando se requiere para pensar con mayor claridad y resolver problemas, es alguien con menos dificultades o mayor habilidad para resolverlas. Al final el beneficio permea alrededor. La cuestión es ponerse como prioridad.
En conclusión, en la psicología positiva se utiliza el término “flow” para definir a quien está inmerso con gozo y concentración en una actividad, sin embargo no siempre es posible sentirse así y una manera de combatir el “atasco” que produce falta de motivación o concentración en lo que se realiza, es utilizar todos los factores intrínsecos y extrínsecos conocidos, como concentrarse en lo que falta para cumplir un objetivo, fijar incentivos al lograr ciertas metas, apoyarse en los compañeros de trabajo para despejar la mente y en el jefe inmediato para resolver situaciones logísticas , con el fin de lograr una mayor automotivación a pesar de que los problemas familiares impidan enfocar la mente en lo que se intenta realizar.
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